En el idílico pueblo de Deurle, Bélgica, a orillas del tranquilo río Lys, se erige una villa que conecta magistralmente el pasado con el futuro. Inicialmente concebida por Ivan Van Mossevelde para un coleccionista de arte, este edificio ha sido hábilmente transformado en la sede de Glenn Sestig Architects. Esta renovación honra la historia de la villa e introduce una sensibilidad contemporánea.

La restauración destaca un diálogo fluido entre los espacios interiores y exteriores. Los elegantes marcos de las ventanas de OTIIMA, con vidrio claro autoportante y perfiles de aluminio delgados, facilitan esta conexión, permitiendo un flujo ininterrumpido de luz natural a lo largo de la residencia. El diseño simétrico de la villa, el patio central y los materiales seleccionados, incluidos los suelos de piedra natural y la iluminación indirecta, crean una atmósfera dramática y tranquila. Destacada en ARK JOURNAL, la Casa Matthys-Colle es un ícono arquitectónico y una celebración de 50 años de evolución en el diseño, preservando su esencia original mientras abraza con audacia un nuevo futuro.